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EL NACIMIENTO

                        El SEAT 132, que fue presentado en el Salón del Automóvil de Barcelona con gran aceptación, nació para sustituir al SEAT 1500 que tan dignamente había cumplido su cometido.
                        El SEAT 132 era un poco mas corto que el 1500, aunque no lo pareciera por sus líneas más bajas y alargadas. También pesaba unos 100 kilos menos, sin embargo, su estructura no perdió nada en cuanto a la rigidez del conjunto que dio fama al 1500.
                       En cuanto a sus formas, se abandonaban las angulosas de aristas vivas del 1500 pasando a ser mas redondeadas tal como imponía la moda del momento, con el parabrisas y la luneta posterior más inclinadas , para ofrecer una mejor penetración aerodinámica en el seno del aire y en beneficio de la velocidad máxima y el consumo.

EL VEHÍCULO

                        La carrocería, vista lateralmente, ofrecía una buena impresión óptica, con la línea baja y alargada, de amplias puertas, y la franja en bajo relieve que comenzaba tras la rueda delantera y acaba en el parachoques trasero. Este, al igual que el delantero eran una sola traviesa, sin escudos protectores de goma, lo cual es más fino y elegante, pero menos eficaz a la hora de evitar golpes de aparcamiento.
                        En la parte posterior era de muy agraciada, con su buen maletero y los grupos ópticos muy simples, funcionales y acertados. Y en los laterales, tras de las ventanillas posteriores, se situaban las rejillas de ventilación, que daban al coche mayor realce y vistosidad en la zona posterior.
                        El embellecimiento se completaba con una tira cromada a la altura de las cerraduras de puerta y por encima de ellas, unas llantas de aspecto deportivo y sin tapacubos, los faros de posición e intermitentes, embutidos en los parachoques delanteros, los mecanismos de apertura de puertas, que eran francamente cómodos y vistosos quedando perfectamente embutidos en la carrocería, la rejilla de entrada de aire para la calefacción, sobre el capo, cromada, y los del limpiaparabrisas en negro mate para evitar posibles reflejos del Sol.
                        En el interior se mejoró mucho la comodidad respecto al 1500, porque ahora se disponía de mayor amplitud y de asientos más mullidos, y con la mejora de la suspensión trasera se incrementaba mucho la estabilidad del vehículo ya que se sustituía la barra de anclaje lateral del eje rígido por un nuevo sistema en el que el guiado del eje es más perfecto.
                        Los asientos, que son la base de la comodidad durante la estancia en el interior del automóvil, eran francamente confortables, no obstante podían haber sido algo más envolventes, porque un cuerpo bien sujeto, que no se desplace de un lado a otro,  no acusa cansancio o dolores nerviosos en ninguna de sus zonas o vísceras, a pesar de recorrer muchos kilómetros en los largos viajes. Por eso, un asiento que no se ciña bien al cuerpo y deje zonas de éste al aire, no puede ser verdaderamente cómodo.
                        En cuando a los asientos posteriores, al estar previstos para poder viajar tres personas, eran perfectamente planos y sin formas anatómicas, pero al viajar dos personas, podían sacar el apoyabrazos central escamoteable ganando algo de confort. Al existir bastante espacio entre estos asientos y los delanteros se podían estirar bien las piernas, sin agobios, lo que lo hacía idóneo como coche de representación, para servicios oficiales o para personas mayores que disponían de conductor a su servicio.
                        La decoración interna era algo sobria pero elegante. Pero destacaba el tapizado de tejido vinílico imitando gruesa pana o canutillo de mucho relieve. Los remates del tapizado en las puertas, arriba y abajo, estaban constituidos por unas cantoneras acolchadas, que eran excelentes para amortiguar los golpes en casos de choque.
                        El salpicadero era de madera autentica (según la versión) y como material noble solo se empleaba en los Rolls o algún que otro inglés. La instrumentación era bastante completa, de izquierda a derecha, esfera pequeña para el manómetro del aceite, esfera grande para el velocímetro y cuentakilómetros total y parcial diario, esfera mediana para indicador de nivel de gasolina con «chivato» anunciador de la reserva y, en la misma también termómetro del agua de refrigeración, esfera grande para el cuentarrevoluciones y esfera pequeña para el reloj electrónico provisto de aguja de segundero. La tapa de la guantera, también de madera, abría suavemente dejando un volumen interno un tanto limitado.
                        Otros accesorios destacados eran  los reposacabezas, que este modelo traía  de serie, así  como los cinturones de seguridad. También llevaba asideros encima de las ventanillas, excepto la del conductor, que donde debe asirse es al volante, unos amplios bolsones para mapas,  ceniceros muy bien situados, luces de cortesía y así como eficaces pestillos de apertura de puertas. El equipo de calefacción con electroventílador era francamente bueno y los aireadores del salpicadero muy eficaces, dirigían el aire hacia donde se precisase,

EL CONDUCTOR

                        El conductor quedaba en una buena posición y cómodamente sentado, aunque el asiento era susceptible de mejoras. El volante quedaba en buena posición y lo mismo los tres pedales. La palanca del cambio estaba igualmente en la posición más cómoda para su manejo y esto era verdaderamente agradable.
                        En cuanto a la dirección, era muy buena dirección, pero debía tenerse en cuenta la existencia de viento lateral.. Es de resaltar, y quizá por las ruedas de 175, que se mostraba algo dura en las maniobras de aparcamiento.
                        El SEAT 132 era un coche rápido, con reacciones de nervio, de pura sangre (para su época), pro no debía confundirse con un deportivo, era un coche para viajar y , seguro en los.

VISIBILIDAD

                        El SEAT 132 contaba con un amplio parabrisas panorámico y una luneta posterior de grandes dimensiones que permitían una buena vista panorámica al frente y amplia detrás. Igualmente, las ventanas laterales permitían buena visibilidad hacia los lados.
                        Los espejos retrovisores facilitaban enormemente la visión hacia atrás, pues tanto el interior, de buen tamaño, como el exterior, situado en la puerta, eran muy eficaces. Aunque en el retrovisor interno, al colocar la posición antideslumbrante quedaba demasiado oscura la visión hacia atrás.
                        La óptica doble con faros halógenos permitía una visión nocturna verdaderamente formidable.

SEGURIDAD

                        La seguridad de este modelo era muy buena, los ensayos demostraban que colisionando contra una pared de hormigón, se deformaba toda la parte delantera, quedando intacto el habitáculo y sin abrirse las puertas, incluso con impactos bastante violentos.
                        También, en los choques por detrás, el largo maletero hacía de zona deformable. Los reposacabezas eran un complemento que podía evitar la grave lesión de fractura de base del cráneo, que puede suceder en los choques por atrás, siendo por ello un detalle digno de elogio.
                        En lo referente a la seguridad activa, evidentemente no tenía los sistemas actuales pero contaba con su poder de aceleración y reprise, la facilidad de maniobra en marcha de la dirección y el buen sistema de frenado.
                        El eje del volante, estaba dividido en tres tramos para evitar que en caso de accidente, el volante se llegase clavar en el pecho del conductor.

ESTABILIDAD

                        Este modelo era bastante estable, sobre todo teniendo en cuenta que era de eje rígido. El fabricante adoptaba en él dos bielas de empuje y reacción superiores dispuestas en diagonal, tendiendo a formar vértice en la prolongación ideal, detrás del diferencial. Por otra parte, habían dos barras de empuje y reacción en los extremos del eje rígido por su parte inferior y con punto de oscilación en la carrocería por delante de dicho eje.
                        Al prescindir de barras estabilizadoras, tanto delante como atrás, estando limitados o amortiguados los recorridos de suspensión por medio de tapones de goma, arriba y abajo en cada eje, inducía a un leve movimiento de balanceo que se presentaba preferentemente en carreteras con curvas hacia ambos lados.

VERSIONES

Versión 1600
                       
La versión 1600 se presentaba en dos modelos;  la normal y la de lujo. Las diferencias estaban en el tapizado y en el tablero de instrumentos, que en el normal era de recubrimiento de aluminio pasivado, mientras que en el de lujo, era de madera.

Versión 1800
                       
La única diferencia respecto a la versión 1600, consistía en el mayor cubicaje del motor.

Versión 2000
                        Esta versión además de ir dotada con un motor de más potencia, ya disponía de servodirección y  presentaba algunas diferencias en lo que a carrocería se refiere.
                        En la dirección apostó por el sistema ZF de recirculación de bolas, asistido hidráulicamente. Tan sólo 3 vueltas de tope a tope, sin esfuerzo en las maniobras, pero manteniendo suficiente sensibilidad en el volante en cuanto la velocidad aumenta un poco. Pero era al salir del aparcamiento y enfilar el tráfico donde más se notaba su presencia.
                        En esta versión, el SEAT132 era un coche francamente cómodo, agradable de conducir y de muy buena visibilidad. La visibilidad se completaba con la luneta térmica y  un limpiaparabrisas de acción intermitente y dos velocidades continuas, que limpia muy eficazmente.
                        Era el coche de tamaño razonable, muy lujoso y cómodo, especialmente apto para viajes largos y rápidos por carretera de trazado muy abierto, donde su silencio y sus excelentes prestaciones brillaban al máximo.

Versión 2000 Diesel
                       
Los defectos más clásicos que se atribuían a los motores de gas-oil (vibración y rumorosidad)  estaban totalmente eliminados en esta versión diesel del SEAT 132. Se notaba la falta de prestaciones al compararlo con el 2000 de gasolina pero su manejo y conducción eran sencillos y cómodos y además destacaba su impresionante elasticidad motriz.
                        Esta versión se presentaba en tres modelos: acabado Normal de tapicería, con cuatro marchas, y acabado de Lujo, que puede ir con cuatro o con cinco marchas.
                        Con este motor Mercedes Benz, se alcanzaba con gran facilidad los 120/130 Km/hora y por sus prestaciones se convirtió en un buen taxi en muchas ciudades Españolas.
                        Entre su equipamento cabe destacar: Faros Kinby circulares (4) de 136 mm. con lámpara halógena (H-1) de 55 vatios, Limpiaparabrisas, Femsa LPH 12-X-154, Escobillas: Ar-to, Instrumentación Veglia-Bressel, 2 bocinas y luneta térmica.

Versión 2200 Diesel
                        Esta versión dotada de un motor de 2200 cm3 Mercedes Benz incorpora todos y cada uno de los nuevos detalles de equipamiento de la nueva gama, con una sola salvedad: la servodirección. La razón es que no cabía la bomba de presión en el compartimento motor, por ese motivo salió inicialmente sin la servodirección, salo este detalle el SEAT 132-D 2.200 era como un coche intachable por lo que a equipamiento, confort y detalles de lujo se refiere.

CURIOSIDADES

                        La empresa TURMESA suministraba un Kit Turbo para el motor 2200 Diesel que le permitía aumentar 12 CV de potencia y un incremento del par motor de un 38%. Este Kit costaba 631 Euros y con la mano de obra y nuevo tarado de la bomba de inyección unos 751 Euros.